Recordamos momentos en los que no hemos sabido ayudar a los demás y pedimos perdón por ellos:
“Señor Jesús, perdónanos por las veces que no compartimos con los demás, por cuando pensamos solo en nosotros y no ayudamos a quien tiene hambre o necesita nuestra amistad.”
Respondemos a las peticiones con:
- «Te lo pedimos Jesús»

