Reflexión 4: Amor que se nota

Dios nos dice en esta parte de la Biblia que el amor no es solo un sentimiento, sino algo que se demuestra todos los días.

Amar no es solo decir “te quiero”, sino también:

• Ayudar a quien lo necesita.

• Perdonar cuando alguien se equivoca.

• Compartir sin quejarse.

• Recibir con cariño a los demás.

Cuando hacemos estas cosas, es como si estuviéramos pintando el mundo con colores alegres. El amor cubre los errores, sana heridas y nos hace sentir mejor a todos.

 

A veces, ayudar cuesta. A veces, perdonar cuesta. Pero si lo hacemos con amor, Dios se alegra y nosotros también nos sentimos felices por dentro.

Dinámica: «El corazón que ayuda»

Materiales:

• Cartulina o papel grande en forma de corazón.

• Post-its o papeles pequeños de colores.

• Plumones o lápices.

¿Cómo se hace?

1. Pega el corazón grande en la pizarra o en la pared.
   (Puedes titularlo: “Acciones que demuestran amor”).

2. Entrega a cada niño 2 o 3 papelitos de colores.

3. Pídeles que piensen en acciones concretas que pueden hacer en casa, en la escuela o con sus amigos para demostrar amor (como «ayudar a mi mamá sin que me lo pida», «invitar a jugar a alguien que está solo», «decir la verdad aunque me cueste», etc.)

4. Cada niño escribe sus ideas y las pega dentro del corazón.

5. Al final, lean algunas de las acciones en voz alta y hablen sobre cómo esas pequeñas cosas pueden cambiar un día, una amistad o incluso un corazón triste.

   Para cerrar:

   «El amor se ve en lo que hacemos. ¿Qué harás hoy tú para demostrarlo?»